Kill your idols and confusion is sex

Esa mañana me levante sintiendo que ya no quería creerte, luego pase a existir, no quería ni escucharte no te había dejado de amar sino que el amor era otro, al hablar nunca más te mire y de aquello que decías poco recuerdo, mientras los días pasaban incrementaba mi actitud, finalmente me has preguntado ¿qué te pasa, por que eres tan cruel? A eso no respondí nada, pero me quedé pensando en como puede pasarse del amor a la crueldad. Aquella frase que recordamos “del amor al odio hay un paso". Lo que resulta difícil de sobrellevar, el amor y la crueldad tenían esto en común, sin embargo eso no era lo que me hacía cruel, lo que lo hizo fue la renuncia a esperarte, renunciar a quererlo todo contigo a querer estar cerca, ahora simplemente soy, no te espero y aún estoy, no me marcho ni te abandono, por el contrario permanezco.
El trayecto entre el amor y la crueldad había sido imperceptible, de lo que recuerdo solo puedo decir que cada día tomaba el mismo autobús, muchas veces trate de decírtelo, pero jamás escuchaste mis palabras, como sin sentido escurrían por tu espalda y nada más errando, quizás, pero inquieta te preguntaba, te acariciaba, te mordisqueaba, te amaba hasta que esa mañana llegó. Ahora me dices porqué eres tan cruel, no se responder, no se decirte nada, ahora solo sé que quiero ser y eso implica ser cruel. No imaginas recorrer estos espesos lugares pero por la aventura que iniciamos parecen indisolubles. Cuando me haces esa pregunta salgo y respiro, miro el cielo y no puedo encontrar respuesta, finalmente pierdo hasta le fe. ¿Que si ya no creo en el amor? - claro que creo, aún más, más que antes, más que nunca, lo que no creo es que para amarte sea necesario dejar de ser, dejar de volcarte sobre ti para encontrar el incierto agujero negro que somos cada uno, adviene la pregunta al llegar, ¿que hay detrás de un agujero negro? rápidamente te encuentras en medio de una abrumadora soledad, a la que también renuncio. Entre renuncias y entregas me la he pasado, ahora en un gesto de íntima implicación me entrego a ser aunque solo pueda ser en la renuncia.
Dijiste en voz alta para intentar capturar mi atención ¿Por qué es tan cruel al amor? Sonreí, hasta tu encontrabas la insospechada relación. Ser cruel hasta en lo más profundo, hasta en lo más intimo del estarse construyéndose en pura inmanencia. Un trago amargo de la vida, instante furtivo y misterioso de cada encuentro, no puedo hoy separarme de la crueldad tal vez en un próximo encuentro tuyo pueda ser yo compasiva si es lo que deseas pero hoy no me pidas renunciar a lo que he decidido apostar, en el ser cruel te implanto el poder que se expande al más, no pidas compasión no quiero ni puedo, ámame en el ser, en la realidad de esta apuesta por ser.